¡El dólar australiano se aprecia con fuerza! El mercado apuesta locamente por una subida de tasas en 2026, ¿todavía hay espacio para más subidas?

Los datos económicos de Australia continúan enviando señales fuertes, impulsando la recuperación del tipo de cambio del dólar australiano. Con la presión inflacionaria difícil de aliviar y un desempeño del consumo interno por encima de las expectativas, las apuestas de los inversores a que el Banco de la Reserva de Australia inicie antes un ciclo de subida de tipos están en aumento, lo que también ha impulsado al dólar australiano frente al dólar estadounidense (AUD/USD).

Datos de consumo interno por encima de las expectativas, la presión inflacionaria no cede

La razón por la que la economía australiana atrae la atención del mercado radica en su solidez fundamental. Los datos de gasto familiar de octubre son una señal clara: un aumento mensual del 1.3%, muy por encima del 0.6% esperado por el mercado; además, el aumento anual alcanza el 5.6%, claramente superior al 4.6% previsto. Estos datos indican que el impulso del consumo familiar en Australia sigue siendo robusto.

Mientras tanto, la problemática inflacionaria no muestra signos evidentes de alivio. El índice de precios al consumidor (IPC) de octubre registró una tasa de aumento anual del 3.8%, también por encima de las expectativas del mercado, lo que significa que la presión de endurecimiento por parte del Banco de la Reserva de Australia está en aumento. Abhijit Surya, economista de Kearney Macro, afirmó que estos datos de gasto familiar confirman que el banco central no continuará bajando los tipos de interés y, en cambio, podría verse obligado a ajustar su postura de política monetaria de manera más rápida.

El dólar australiano sube en respuesta, alcanzando un máximo en meses

La reacción del mercado a estos datos fue muy rápida. La rentabilidad de los bonos a 3 años de Australia superó el umbral del 4%, alcanzando niveles no vistos desde enero de este año. Impulsado por esto, el tipo de cambio AUD/USD se fortaleció, y al cierre de esta edición cotizaba a 0.6615, alcanzando su nivel más alto en más de un mes.

Esta tendencia de apreciación se debe a una reevaluación del mercado respecto a la postura de política del Banco de la Reserva de Australia. Los inversores están ajustando sus expectativas previas de que el banco central continuará bajando los tipos, preparándose en cambio para la posibilidad de una subida.

Expectativas de subida de tipos en auge, el mercado ya contempla acciones en 2026

Lo más destacado es la apuesta agresiva del mercado de divisas respecto a la hoja de ruta del Banco de la Reserva de Australia para subir tipos. Antes de la publicación de los datos de gasto familiar, la probabilidad de que la tasa suba en mayo de 2026 era solo del 18%, pero posteriormente subió rápidamente hasta el 55%, lo que refleja un cambio de sentimiento en el mercado en un corto período.

El Banco de la Reserva de Australia anunciará su última decisión de política monetaria el 9 de diciembre. Aunque en lo que va de año ha realizado tres recortes de tasas, considerando la realidad de un aumento en la presión inflacionaria, se espera que mantenga la tasa de referencia en el 3.6% sin realizar cambios adicionales en el corto plazo.

Varias instituciones ven con optimismo la apreciación del AUD, aunque con diferencias en el alcance

En cuanto a la tendencia a medio plazo del dólar australiano frente al dólar estadounidense, las principales instituciones ya ofrecen pronósticos relativamente optimistas. El National Australia Bank (NAB) prevé que el AUD alcanzará 0.67 en diciembre de 2025 y luego subirá a 0.71 en junio de 2026. El Westpac Banking Corporation es un poco más cauteloso, estimando que llegará a 0.69 en marzo de 2026, a 0.70 en septiembre y a 0.71 al cierre del año. El ING, en su pronóstico de línea media, sitúa la paridad en 0.68 en el segundo trimestre de 2026 y en 0.69 al final del año.

En general, el mercado ha formado un consenso sobre la dirección de la apreciación del dólar australiano, aunque existen diferencias en las estimaciones del alcance. Lo que será clave será la señal que envíe la decisión del Banco de la Reserva de Australia en diciembre y la evolución de los datos de inflación en los próximos meses.