También deberías confiar en Crypto

Si has estado en la industria de encriptación estos últimos años, seguramente has sentido esa creciente “sensación de agotamiento”.

El fin de semana pasado, el artículo extenso del cofundador de Aevo, Ken Chan, sin duda tocó el corazón de muchas personas. Usó un título extremo: “He desperdiciado 8 años de mi vida en la encriptación”.

Este no es el estado de una persona, sino el cansancio colectivo de los profesionales de la industria. Ken ha escrito la verdad que muchos no se atreven a admitir: en la encriptación, es realmente fácil perder la noción del tiempo.

Nada viene de la nada.

Puede que hayas desvelado por los airdrops, que hayas estado atento al mercado por el lanzamiento, que hayas seguido el relato persiguiendo subidas y bajadas, que hayas pasado toda la noche investigando un nuevo protocolo, y que hayas participado en la gobernanza de la comunidad realizando innumerables trabajos no remunerados. Desde el romántico liberalismo, pasando por el experimento de la autonomía en la cadena, hasta hoy, con el meme, los contratos perpetuos y el frenético descenso de las apuestas, todo esto realmente es suficiente para hacer dudar: ¿realmente estamos participando en una revolución tecnológica o simplemente estamos trabajando para un casino de avaricia infinita?

La duda de los profesionales no se debe a que no sean lo suficientemente firmes, sino a la dura estructura de la industria de la encriptación: el ciclo de vida de la narrativa es más corto que el ciclo de vida del producto; la popularidad es mayor que los fundamentos; la velocidad de la especulación es mucho más rápida que la velocidad de construcción; la adoración a los héroes coexiste con la duda colectiva; el destino de muchos proyectos no es el fracaso, sino la desaparición.

Debo decir con franqueza que los sentimientos de Ken son algo que muchas personas han experimentado. Y esas dudas no son infundadas.

“¿Qué es lo que realmente estamos defendiendo?” El peso de esta pregunta puede ser mucho mayor que el de “¿subirá el precio del bitcoin?”.

Entonces, cuando decimos “creemos en la encriptación”, ¿en qué estamos creyendo realmente? ¿Estamos creyendo en el equipo del proyecto? No. ¿Estamos creyendo en algún KOL famoso? Por supuesto que no. ¿Estamos creyendo en una narrativa tras otra? Eso es aún menos probable.

Muchas personas de repente se dan cuenta: lo que realmente han creído todo este tiempo, probablemente se reduce a una sola cosa: lo que seguimos manteniendo y creyendo es el significado de la encriptación para este mundo.

Por lo tanto, después de que el artículo de Ken se volviera viral, Nic Carter, cofundador de Castle Island Ventures, rápidamente escribió otro artículo en respuesta titulado “No me arrepiento de haber pasado ocho años en la encriptación”.

¿Cuál es el significado de la encriptación para este mundo? Nic Carter presentó sus cinco puntos de vista: hacer que el sistema monetario sea más sólido, codificar la lógica comercial con contratos inteligentes, hacer que la propiedad digital sea real, mejorar la eficiencia del mercado de capitales y ampliar la inclusión financiera global.

No olvides por qué partimos

Cada vez que la industria cae en el caos, tal vez podamos leer de nuevo el libro blanco de Bitcoin.

Un sistema de efectivo electrónico punto a punto, esta es la primera frase del libro blanco.

En 2008, la crisis financiera, el colapso de bancos, el estruendoso derrumbe de Lehman. Financieros y políticos hicieron que todo el mundo pagara por sus riesgos y errores.

El nacimiento del Bitcoin no fue para crear riqueza, sino para responder a una pregunta: “¿Podemos establecer un sistema monetario que no dependa de ninguna institución centralizada?”

Esta es la primera vez en la historia que la humanidad tiene una moneda que no necesita confiar en nadie. Este es el único sistema financiero en el mundo que, en el verdadero sentido, no pertenece a ningún país, empresa o individuo. Puedes criticar ETH, criticar Solana, criticar todas las L2, criticar todos los DEX, pero pocas personas criticarán a Bitcoin, porque su propósito original nunca ha cambiado.

Cualquier empresa de Web2 puede cerrar tu cuenta mañana; pero nadie puede detenerte de enviar un bitcoin mañana. Siempre habrá personas que no les gusta, que no creen en ello, o incluso que lo atacan, pero nadie puede cambiarlo.

El agua no compite, sino que beneficia a todas las cosas.

La normalización de la inflación global, el alto nivel de deuda soberana, la escasez de activos tras la larga caída de las tasas de interés sin riesgo, la opresión financiera, la falta de privacidad… La existencia de estos problemas hace que la visión de la industria encriptación no esté desactualizada, sino que sea aún más urgente. Como dijo Nic Carter: “Nunca he visto una tecnología que pueda impulsar la actualización de la infraestructura del mercado de capitales más que la encriptación.”

¿Por qué esta no es una industria fracasada?

Ken dijo que desperdició ocho años. Pero, ¿realmente desperdiciamos nuestra juventud?

En países con hiperinflación como Argentina, Turquía y Venezuela, el BTC y las stablecoins se han convertido en un “sistema financiero en la sombra” en la práctica; cientos de millones de personas que no pueden acceder al sistema bancario tienen por primera vez activos digitales globales; la humanidad tiene por primera vez activos globales que puede controlar de manera autónoma; los pagos internacionales ya no necesitan bancos por primera vez; miles de millones de personas pueden acceder por primera vez al mismo sistema financiero; la infraestructura financiera comienza a desprenderse de las fronteras nacionales; un activo que no depende de la violencia y el poder comienza a ser reconocido globalmente…

Para un país con alta inflación, una moneda estable que no se deprecia es como un arca de Noé, por lo que las stablecoins representan el 61.8% del volumen de transacciones de criptomonedas en Argentina. Para los freelancers, nómadas digitales y la clase alta que tienen negocios en el extranjero, el USDT es su dólar digital.

En comparación con esconder dólares debajo del colchón, o arriesgarse a cambiar divisas en el mercado negro, hacer clic con el mouse para convertir pesos en USDT parece más elegante y seguro.

Tanto las transacciones en efectivo de los vendedores ambulantes como las transferencias de USDT de las élites son, en esencia, una falta de confianza en el crédito del estado y una protección de la propiedad privada. En un país con altos impuestos, bajos beneficios y una moneda que se deprecia constantemente, cada “transacción gris” es una resistencia contra el saqueo institucional.

Durante cien años, la Casa Rosada de Buenos Aires ha tenido una y otra vez nuevos dueños, y el peso ha perdido un billete tras otro. Pero la gente común, a través del comercio subterráneo y la sabiduría gris, ha encontrado un camino en un callejón sin salida. Lectura relacionada: “Argentina subterránea: casas de cambio judías, supermercados chinos, jóvenes en decadencia y la clase media empobrecida”

Casi todos los 20 principales fondos del mundo han establecido departamentos de Web3; las instituciones TradFi continúan fluyendo (BlackRock, Fidelity, CME); el sistema de moneda digital de los países se toma como referencia el bitcoin; los ETF de activos digitales en toda América están rompiendo nuevos récords de flujo de fondos; en solo 15 años, el bitcoin ya se ha situado entre los diez principales activos financieros del mundo…

A pesar de las burbujas, la especulación, el caos y los engaños, ya se han producido algunos hechos. Estos cambios han alterado de manera tangible el mundo. Y nosotros, estamos en una industria que seguirá cambiando la estructura financiera global.

¿Realmente no hemos dejado nada?

Muchas personas todavía preguntan: “Si dentro de 15 años, estas cadenas ya no existen, los proyectos han desaparecido y los protocolos han sido sustituidos por infraestructuras más avanzadas. ¿No sería un desperdicio de juventud lo que estamos haciendo ahora?”

Veamos otro sector: en el año 2000, la burbuja de Internet estalló y el NASDAQ cayó un 78%; en 1995, Amazon también fue criticada como «un sitio que vende libros»; en 1998, Google fue considerado «menos útil que Yahoo»; en 2006, las redes sociales fueron vistas como «la rebeldía de los adolescentes».

Los primeros días de Internet estuvieron llenos de: miles de startups que fracasaron; innovaciones que desaparecieron por completo; grandes inversiones que resultaron en pérdidas; decenas de miles de personas que creyeron haber desperdiciado su juventud.

Los primeros BBS, portales, acceso telefónico a Internet y correos electrónicos de pago prácticamente ya no existen. El 90% de los productos de la primera generación de Internet móvil no han sobrevivido. Pero no fueron en absoluto un “desperdicio”; formaron el suelo de la era móvil.

La infraestructura que crearon: navegadores, TCP/IP, servidores tempranos, compiladores, lograron: Facebook, Google, Apple, todo el fundamento de Internet móvil, computación en la nube, IA. La historia del desarrollo de las redes sociales es un ciclo que se rompe constantemente, como si el TikTok de hoy estuviera compuesto por innumerables redes sociales que han muerto.

Cada generación reemplaza a la anterior, pero ninguna de ellas es en vano.

No hay ninguna industria que haya recorrido su camino de manera limpia, lineal, clara, correcta y con respuestas precisas. Todas las industrias de tecnología básica han pasado por caos, burbujas, ensayo y error, y han sido malinterpretadas, hasta que cambiaron el mundo.

El sector de la encriptación también es así.

La revolución tecnológica de la industria de la encriptación nunca ha sido completada por una sola generación. Todo lo que hacemos, incluso si en el futuro ETH es reemplazado por otras cadenas, L2 es reescrito con nuevas arquitecturas, y todos los DEX que usamos hoy desaparecen, nunca será en vano.

Porque lo que ofrecemos es un suelo básico, es ensayo y error, son parámetros, es un experimento social, es dependencia de trayectoria, son experiencias y muestras absorbidas por el futuro. Y no el resultado final en sí.

Además, no estás solo en tu perseverancia.

En todo el mundo, todavía hay millones de desarrolladores, investigadores, gerentes de fondos, operadores de nodos, constructores y traders que están impulsando lentamente esta era hacia adelante. Estamos contigo.

——Escrito para aquellos que todavía están en este camino.

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