Siempre escucho preguntar, ¿por qué la cantidad de mineros de FIL sigue disminuyendo? En realidad, la respuesta es bastante sencilla: los primeros mineros firmaron contratos de 5 años de duración.

En octubre de 2020 se lanzó la red principal de FIL, y ya han pasado más de 5 años. Esos contratos de los mineros iniciales han ido venciendo uno tras otro; algunos han decidido salir, otros siguen manteniéndose. Solo con revisar la línea de tiempo se puede verificar esta lógica.

Pero, ¿qué más se puede hacer con esta moneda además de esperar que suba de precio? Invertir en productos financieros. Se puede bloquear la moneda por hasta tres meses para obtener beneficios. En comparación, con tokens como UNI o SUSHI, no existe esa opción, quizás por las diferencias en los periodos de lanzamiento.

El mercado actual realmente está un poco incómodo—sin subir ni bajar. En momentos así, jugar con contratos suele ser lo más arriesgado, ya que se puede ser víctima de reventas repetidas. Pero, en realidad, creo que esto también es una oportunidad. Sacar parte del dinero en efectivo, buscar esas monedas que ya tocaron fondo y que aún generan intereses, y construir posiciones poco a poco. En lugar de preocuparse por las fluctuaciones a corto plazo, mejor tratarlo como un producto financiero.

Un aspecto característico de proyectos como FIL es que los tokens se desbloquean de forma lineal. La circulación aumenta cada vez más, y en las etapas finales, el precio tiende a ser más fácil de suprimir. Pero ya se ha desbloqueado más de la mitad, y la fase de mayor presión de venta en realidad ya pasó.

Mirando también a las instituciones. Grayscale y otros grandes jugadores han comprado FIL 86 veces este año, con un coste promedio de aproximadamente 10 dólares. Algunos dicen que los minoristas no pueden competir con las instituciones, pero ese argumento no siempre es correcto. Las instituciones enfrentan evaluaciones anuales y metas, y la inversión periódica es en realidad su estrategia más segura. Nosotros, los particulares, también podemos aprender esta estrategia simple: construir posiciones poco a poco, comprar más cuando cae, mantener o participar en intereses. No hay que ser muy inteligente, simplemente hacerlo así.

No siempre pienses en hacerte rico rápidamente. Cuando el mercado está mal, acumular monedas, generar intereses y esperar, esa es la forma más sólida para que las personas comunes cambien su suerte. Cuando el mercado vuelva a calentarse el próximo año, con monedas en mano, no te sentirás nervioso. Si estás de acuerdo con la lógica de que "lento es rápido", ahora es el momento de actuar, no esperes a que suba para arrepentirte.