Cuanto mejores sean las cosas, menos debes hablar de ellas; si hablas demasiado, seguro que alguien sentirá envidia, lo que provocará descontento y sembrará discordia. Una humildad adecuada hará que los demás piensen que todos sois más o menos iguales, y así será menos probable que alguien intente influir o interferir en tu vida.
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Cuanto mejores sean las cosas, menos debes hablar de ellas; si hablas demasiado, seguro que alguien sentirá envidia, lo que provocará descontento y sembrará discordia. Una humildad adecuada hará que los demás piensen que todos sois más o menos iguales, y así será menos probable que alguien intente influir o interferir en tu vida.