Esta maniobra del Banco de Japón podría esconder una oportunidad de comprar en mínimos.

En diciembre, el Banco de Japón confirmó una subida de tipos, aumentando la tasa de referencia del 0,5% al 0,75%. Es la segunda vez este año que endurecen la política monetaria. A primera vista parece negativo, pero en realidad podría dejar una ventana para los inversores que mantengan la calma.

En los últimos años, el yen japonés, con tipos cercanos a cero, se ha convertido en la principal moneda para operaciones de arbitraje global: pedir préstamos en yenes para comprar activos denominados en dólares o invertir en criptomonedas tenía un coste muy bajo. Ahora, con el repentino aumento del coste de financiación, es muy probable que los fondos con alto apalancamiento salgan primero, y a corto plazo el mercado cripto, especialmente las altcoins con menor liquidez, sufran presión.

Sin embargo, los datos históricos muestran una pauta: cada vez que se produce una venta de pánico de este tipo, en realidad los activos principales como Bitcoin y Ethereum caen a zonas de valor. El gran capital solo está reajustando sus carteras; la verdadera demanda de refugio y la lógica antiinflacionaria no cambian, y una vez que la liquidez se estabilice, volverán para tomar posiciones.

Actualmente, se pueden considerar dos enfoques:
Primero, controlar la exposición y reservar liquidez para entrar por fases en los principales criptoactivos cuando retrocedan un 5%-10%;
Segundo, fijarse en proyectos con buenos fundamentales que hayan sido castigados por el sentimiento de mercado y abrir posiciones pequeñas de forma prudente.

La volatilidad del mercado es la norma; el pánico suele generar oportunidades. Mantén la calma, no persigas precios en los picos de euforia, ni vendas en el fondo del miedo.