Hay algo gestándose en la maleza de Texas que la mayoría de la gente aún no ha notado.

A 35 minutos en coche de Austin, lo que solía ser tierras agrícolas vacías se está transformando en algo que parece sacado directamente de una novela de ciencia ficción. Lo llaman Snailbrook - y no es su típico parque industrial.

Aquí es donde los ingenieros de SpaceX fichan. Donde The Boring Company está literalmente remodelando la infraestructura subterránea. Donde X está echando raíces más profundas en el suelo de Texas.

Todo el conjunto se está expandiendo a un ritmo que te hace preguntarte cómo será el resultado final. ¿Ciudad empresarial? ¿Distrito de innovación? ¿Un terreno de pruebas para algo más grande?

Sea lo que sea que se convierta, una cosa está clara: cuando alguien comienza a consolidar su imperio en una ubicación física, generalmente está planeando su próximo movimiento.