El ciclo de ajuste de tres años está a punto de llegar a su fin.

Si prestas atención a lo macro, deberías sentir que la dirección del grifo está cambiando silenciosamente. Aquí están los puntos en el tiempo: el QT está llegando a su fin, casi está asegurado que habrá una reducción de tasas en diciembre, y el mercado ya ha comenzado a discutir la posibilidad de una nueva ronda de flexibilización cuantitativa en el primer trimestre del próximo año.

Esto recuerda el punto de inflexión de marzo de 2020. En ese momento, una vez que comenzó el QE infinito, BTC pasó de más de tres mil dólares a cerca de setenta mil. Por supuesto, el entorno era más extremo en ese entonces, pero la infraestructura de esta vez es mucho más sólida: los ETF de contado de BlackRock se han convertido en una fuente de ingresos reales, Ethereum se ha transformado en un activo que puede generar rendimientos a través de Layer2 y mecanismos de staking, y los canales de cumplimiento para la entrada de instituciones ya están bien establecidos.

Una vez que la liquidez se afloja, los primeros en beneficiarse siempre son los pocos activos que tienen el consenso más fuerte y las transacciones más activas.

Ahora puede que necesites aclarar algunas cosas:
Una es no salir fácilmente en este momento: ya hemos soportado la etapa de la contracción más difícil, no entregues tus fichas antes de que la política cambie.
En segundo lugar, se debe prestar especial atención a Bitcoin y Ethereum, que son los principales líderes y los más directos reservorios de liquidez.
En tercer lugar, mantén una parte de fondos de maniobra. El mercado no subirá en línea recta, pero tampoco pienses en quedarte en liquidez esperando el llamado "punto bajo perfecto".

A menudo, ganar dinero no depende de ser más inteligente que los demás, sino de tener más paciencia que ellos. Cuando llega la tendencia, estar presente en el mercado es lo más crucial.