Para que el Agente de IA se implemente realmente, no se puede prescindir de tres etapas clave.

¿Qué está haciendo TAO? Construyendo una capa de inteligencia artificial descentralizada. ¿Y SUI? Encargado de almacenar los datos de memoria de la IA. Pero solo tener inteligencia y almacenamiento no es suficiente: el grafo de conocimiento de Intuition es el nodo clave que conecta todo.

Convierte la memoria y la inteligencia de la IA en activos verificables que realmente pertenecen al usuario y que pueden monetizarse directamente. Imagina esto: tu asistente de IA recuerda todas tus preferencias y hábitos, estos datos no pueden ser alterados o olvidados arbitrariamente, y no necesitas autorizar repetidamente al ejecutar transacciones en múltiples plataformas.

¿Qué es más importante? Tu agente aprenderá de ti, te recordará y evolucionará sin inventar valores que en realidad no existen.

Esta es la lógica subyacente que permite que la economía de los Agentes de IA se escale realmente. Sin una capa de memoria confiable, incluso el Agente más inteligente no es más que una herramienta que habla.