Hoy en Asia está un poco interesante: el mercado de valores y el mundo Cripto se están desplomando, Bitcoin, el Nikkei 225 y el índice compuesto de Corea del Sur, todos tienen un rendimiento bastante malo.

¿El culpable? El mercado está apostando si el banco central de Japón intervendrá para aumentar las tasas de interés.

Recientemente, el gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, lanzó un indicio: si los datos económicos son lo suficientemente buenos, no se puede descartar un aumento de tasas. Actualmente, el mercado apuesta por una probabilidad del 48% de un aumento de 25 puntos básicos y del 51% de mantener el status quo, lo que es prácticamente un 50/50. Lo que es aún más estimulante es que el rendimiento de los bonos del gobierno japonés a 10 años ya ha alcanzado el 1.80%, a solo un paso de su máximo histórico.

¿Por qué es tan sensible este asunto? Porque Japón ha mantenido durante mucho tiempo tasas de interés ultra bajas, lo que equivale a proporcionar un "pool de fondos baratos" a toda Asia. Muchas instituciones se aprovechan de esto para hacer arbitraje: piden préstamos en yenes a bajo interés y los invierten en activos de alto rendimiento (como criptomonedas, acciones de mercados emergentes). Ahora, una vez que se suban las tasas, el costo de los préstamos aumentará, y este juego ya no se podrá jugar. Cuando se retiran los fondos, naturalmente surge el sentimiento de pánico.

Sin embargo, lo interesante es que, según los datos en la cadena de Bitcoin y la distribución de chips, los inversores no están tan asustados como para querer huir; al menos, por el momento no se han visto signos de venta por pánico.

Por cierto, ayer surgió un rumor: se dice que el presidente de la Reserva Federal, Powell, renunciará el 1 de diciembre.

Creo que esto es casi seguro falso. La noticia provino inicialmente de algún gran influencer en redes sociales en el extranjero, pero los principales medios financieros de EE. UU. y el sitio web de la Reserva Federal no han hecho ningún comentario. Un puesto de la categoría del presidente de la Reserva Federal debe seguir un proceso completo para renunciar: nominación por el Senado, audiencias, votación, y aunque sea rápido, tomará al menos dos o tres semanas. Incluso si Powell realmente quisiera irse, no podría ser de manera tan repentina.

Así que no te dejes llevar por la corriente, es más confiable prestar atención a los datos reales y señales de políticas que seguir la multitud.