Goldman Sachs lanzó una predicción explosiva: para finales de 2026, el precio del oro podría alcanzar los 4900 dólares. ¿Suena exagerado? Pero la lógica detrás de esto merece que cada persona que siga BTC y ETH la reflexione seriamente: este asunto podría estar más relacionado con la dirección del mercado de criptomonedas de lo que piensas.

**¿Por qué el oro de repente es tan fuerte?**

Primero hablemos del primer impulsor: los bancos centrales de varios países están acumulando oro de manera frenética. Desde 2022, los bancos centrales de todo el mundo han estado comprando netamente más de 1000 toneladas de oro al año, lo que ha duplicado la proporción de la demanda total del mercado al 23%. El congelamiento de las reservas de divisas de Rusia ha sonado la alarma para muchos países: ¿es confiable el dólar? Así que los mercados emergentes han comenzado a ver el oro como una "caja de seguridad apátrida", y esta corriente de "desdolarización" sigue acelerándose. Goldman Sachs estima que en los próximos dos años, los bancos centrales necesitarán comprar entre 70 y 80 toneladas al año, que es el piso duro para el precio del oro.

El segundo impulsor es más directo: la Reserva Federal tiene que continuar bajando las tasas de interés. El oro no genera intereses, por lo que teme un entorno de altas tasas de interés. Pero ahora se espera que haya un espacio de reducción de tasas de entre 75 y 100 puntos básicos, lo que disminuye el costo de oportunidad de tener oro. Mirando hacia atrás en el ciclo de flexibilización de 2008 a 2015, el precio del oro pasó de 800 a 1900 dólares, ¿se repetirá la historia?

**La estructura del mercado esconde amplificadores**

El mercado del oro en realidad no es muy "grande", el tamaño del ETF es solo una septuagésima parte de la deuda pública de EE. UU. Este pequeño estanque es especialmente propenso a ser agitado por los fondos. Hay un cálculo bastante interesante: siempre que los compradores creyentes aumenten sus compras en 100 toneladas, el precio del oro podría subir alrededor del 1.7%. Cuando los flujos de fondos del ETF, el capital especulativo y las compras de oro por parte de los bancos centrales resuenan juntos, la volatilidad se amplificará notablemente.

**pero no solo veas lo bueno**

Si la situación geopolítica se calma, la demanda de refugio se enfriará de inmediato. Si la inflación persiste sin disminuir, la Reserva Federal podría "mantenerse al margen", lo que obligaría a revalorizar las expectativas de recortes de tasas. En el aspecto técnico, a menudo hay presión de retroceso cerca de los niveles enteros. Hay algo más sutil: las criptomonedas, como el "oro digital", están desviando una parte de los fondos. Monedas como ZEC, que se centran en la privacidad, también están, en cierta medida, robando la narrativa de "refugio" del oro.

**Se están produciendo cambios más profundos**

La lógica subyacente de la fijación del oro está cambiando. En el pasado, se prestaba atención principalmente a las tasas de interés reales, ahora el peso de la asignación estratégica de los bancos centrales es cada vez mayor. Detrás de esto hay una profunda sospecha global hacia el sistema de crédito del dólar: esta sospecha es precisamente la misma fuerza que impulsa a BTC a pasar de ser marginal a ser mainstream.

**Consejos para los usuarios de Gate**

Si los inversores privados también comienzan a diversificar masivamente, 4900 dólares podrían ser solo una estación intermedia. Pero tanto el oro como los activos encriptados no deberían ser considerados herramientas de especulación a corto plazo. La práctica razonable es: tener una parte a través de ETF de oro o en posesión física, al mismo tiempo que se mantiene una asignación moderada en monedas principales como BTC y ETH, construyendo así una verdadera cartera diversificada. El sistema monetario se está reestructurando, mantener el valor es lo que realmente importa.