

El dinero fiat es una moneda reconocida como curso legal y, por lo general, respaldada por la normativa gubernamental. El término "fiat" proviene del latín y significa «hágase» o «por decreto». Esto indica que el dinero fiat obtiene su legitimidad y su estatus a través de un decreto, orden o ley emitidos por el gobierno. Por definición, el dinero fiat no tiene valor intrínseco, ya que no está respaldado por bienes físicos ni metales preciosos. Normalmente, la moneda fiat se fabrica con materiales de bajo coste, como el papel. Por ejemplo, los billetes modernos son papeles especialmente protegidos cuyo valor inherente es mínimo. A pesar de carecer de valor intrínseco, el dinero fiat se acepta ampliamente como medio de pago en la sociedad actual.
Además del respaldo y la regulación del gobierno, el motivo principal por el que el dinero se considera fiat y es reconocido socialmente radica en la creencia colectiva. El valor de la moneda fiat depende en gran medida de un consenso compartido sobre su valor de mercado y su función como medio de intercambio con poder adquisitivo. La aceptación del dinero fiat está íntimamente ligada al decreto gubernamental y a la convención social, así como a la expectativa de que su valor se mantenga en el futuro. Si la confianza pública o el respaldo estatal se debilitan, el valor real de la moneda como medio de pago puede desplomarse de forma rápida y drástica. Esta situación pone de relieve la fragilidad del sistema monetario fiat y su dependencia de la confianza social.
Dado que la mayoría de las monedas fiat no están respaldadas por metales preciosos como oro, plata o cobre, ni por otras materias primas, los bancos centrales pueden provocar fuertes fluctuaciones en la oferta monetaria. Esta característica explica por qué se denomina fiat y cómo se diferencia del histórico dinero mercancía. El sistema fiat proporciona a los bancos centrales las herramientas para aplicar la política monetaria, pero también implica riesgos. En particular, la expansión incontrolada de la oferta monetaria puede provocar periodos de inflación extrema, conocidos como hiperinflación. La historia demuestra en numerosas ocasiones que la emisión excesiva de dinero fiat ha llevado a la devastadora devaluación de monedas nacionales.
Los registros históricos indican que el primer papel moneda apareció en China en el siglo XI. La dinastía Song es conocida por emitir jiaozi, considerados los primeros billetes respaldados por el gobierno. Los jiaozi eran una forma primitiva de billete creada para sustituir las pesadas monedas de hierro que se utilizaban entonces. Este avance es clave para comprender por qué el dinero se denomina fiat: incluso en ese momento, su valor lo determinaba el decreto gubernamental, no su composición material. Después, la dinastía Yuan adoptó y utilizó el dinero fiat de manera generalizada como principal medio de intercambio. La era Yuan abarcó de 1271 a 1368, pero la moneda fiat siguió vigente durante la posterior dinastía Ming (1368–1644), lo que demuestra la influencia duradera de esta innovación financiera en la economía china.
El dinero fiat es la base del sistema financiero actual y funciona gracias a la regulación estatal y a la confianza colectiva. Comprender por qué el dinero se llama fiat permite identificar sus particularidades: aunque carece de valor intrínseco, la moneda fiat funciona eficazmente como medio de intercambio por la autoridad legal y el consenso social. Este sistema, sin embargo, presenta riesgos asociados a la emisión descontrolada y a la inflación. La evolución histórica del papel moneda, originada en la antigua China, demuestra cómo los sistemas monetarios se adaptan a las necesidades sociales. Entender la naturaleza y el funcionamiento del dinero fiat es fundamental para comprender la dinámica económica contemporánea.
Se denomina fiat por la palabra latina "fiat", que significa decreto. Su valor lo determina una orden estatal, no el valor material. El dinero fiat existe gracias a la confianza y a su aceptación como medio de intercambio.
Se llama dinero fiat porque el término procede del latín "fiat", que significa «hágase». Es una moneda de curso legal sin valor intrínseco, establecida por decreto gubernamental.
El dinero fiat es una moneda a la que el gobierno otorga estatus de curso legal, pero carece de valor intrínseco y no está respaldada por activos tangibles. El dinero ordinario puede estar respaldado por oro u otras materias primas.
El dinero fiat es una moneda no respaldada por materias primas preciosas, cuyo valor es fijado y gestionado por el gobierno. Se reconoce como moneda de curso legal dentro de un país.







