El ciclo de Kondratiev nos dice que las oportunidades de riqueza se esconden en las grandes olas de la época. Entonces surge la pregunta: ¿dónde estará el próximo punto de explosión del crecimiento global?

Tras leer el informe de McKinsey, lo he desglosado en cinco líneas principales, cada una de las cuales podría reescribir las reglas del juego de la próxima década.

**Primero, la base: la capacidad de computación.** Semiconductores, servicios en la nube, software de IA, no existen de forma aislada. Los chips determinan el límite superior de la capacidad de computación, la nube convierte esta capacidad en un producto que puede comprarse bajo demanda, y el software de IA empaqueta estas capacidades como herramientas. Esta capa es como una "nueva electricidad": no es que una industria crezca, sino que todas las industrias se ven aceleradas.

**La segunda línea es la digitalización.** Comercio electrónico, publicidad, streaming, videojuegos, y la ciberseguridad como el "impuesto del mundo digital". El núcleo de esta ola es la redistribución de la atención y la eficiencia. Los ganadores suelen quedarse con la mayor parte del mercado, pero la competencia es la más feroz.

**Luego viene la electrificación de la energía y el transporte.** Los vehículos eléctricos y las baterías son sectores evidentes, mientras que la fisión nuclear es más bien una "solución de respaldo para demandas energéticas extremas". Aquí no faltan historias, lo que falta es superar restricciones duras como la cadena de suministro, materiales, rendimiento de fabricación o la red de carga. Quien sea capaz de superar estas barreras, sobrevivirá hasta el final.

**La biotecnología es la cuarta ola.** Biotecnología industrial, medicamentos para adelgazar, tratamiento de enfermedades crónicas; los impulsores son el envejecimiento de la población y la presión por la eficiencia sanitaria. Aquí la curva de crecimiento no es lineal: una decisión regulatoria o un resultado clínico pueden cambiar la forma de la curva. La oportunidad y el riesgo son igual de grandes.

**Por último, la materialización de la tecnología dura.** Conducción autónoma compartida, robótica, construcción modular, espacio, movilidad aérea del futuro. Para que estos sectores despeguen deben superar tres barreras: seguridad, curva de costes e infraestructuras. El mercado tiende a "poner precio a las fantasías" aquí, pero una vez superado el punto crítico, el crecimiento puede ser descomunal.

Mi opinión es: la próxima ola de crecimiento no vendrá de una superindustria, sino de la combinación de varias tecnologías base que impulsarán simultáneamente a varios sectores por la curva S. Encuentra la línea en la que puedes participar y acércate lo máximo posible a esa dirección.