No es una revolución estruendosa, sino que ha penetrado en la vida cotidiana de manera silenciosa. Las finanzas están reconfigurando la vida de una forma que casi no puedes percibir.
Ese momento me dejó una impresión muy profunda: un mercado matutino en el sudeste asiático, apenas al amanecer. La hermana que vendía el desayuno miraba hacia abajo y deslizaba su teléfono, devolviendo ese pequeño préstamo que había tomado la noche anterior. ¿Todo el proceso? Fue cuestión de unos pocos segundos, tan fácil como enviar un mensaje en WeChat. Un ícono de algún protocolo DeFi parpadeó en la pantalla y luego desapareció.
Nadie le enseñó qué es el préstamo en cadena, ni nadie le explicó los contratos inteligentes. Solo sabe que cuando necesita dinero puede pedirlo prestado, y cuando tiene que devolverlo, solo tiene que tocar la pantalla de su teléfono dos veces y listo. Así de simple.
Esto es realmente la penetración: cuando la tecnología ya no necesita ser comprendida, sino que existe de forma tan natural como respirar.
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Algunos cambios llegan sin hacer ruido.
No es una revolución estruendosa, sino que ha penetrado en la vida cotidiana de manera silenciosa. Las finanzas están reconfigurando la vida de una forma que casi no puedes percibir.
Ese momento me dejó una impresión muy profunda: un mercado matutino en el sudeste asiático, apenas al amanecer. La hermana que vendía el desayuno miraba hacia abajo y deslizaba su teléfono, devolviendo ese pequeño préstamo que había tomado la noche anterior. ¿Todo el proceso? Fue cuestión de unos pocos segundos, tan fácil como enviar un mensaje en WeChat. Un ícono de algún protocolo DeFi parpadeó en la pantalla y luego desapareció.
Nadie le enseñó qué es el préstamo en cadena, ni nadie le explicó los contratos inteligentes. Solo sabe que cuando necesita dinero puede pedirlo prestado, y cuando tiene que devolverlo, solo tiene que tocar la pantalla de su teléfono dos veces y listo. Así de simple.
Esto es realmente la penetración: cuando la tecnología ya no necesita ser comprendida, sino que existe de forma tan natural como respirar.