Oxford University Press acaba de soltar su palabra del año 2025, y sorpresa sorpresa—está relacionada con cómo el baiting de ira domina nuestros feeds ahora.
La elección refleja lo que todos vemos a diario: las opiniones controvertidas y los debates acalorados no son errores en las plataformas sociales, son características que impulsan las métricas de engagement a niveles extremos. La indignación se ha convertido en la moneda de la atención en los espacios digitales.
Ya sea en las redes sociales tradicionales o en las plataformas descentralizadas emergentes, el patrón se mantiene. El contenido provocador se difunde más rápido, los algoritmos recompensan las reacciones emocionales, y de repente todos están optimizando para la controversia en lugar de la conversación.
Te hace preguntar qué significa esto para los espacios impulsados por la comunidad que intentan construir algo diferente. ¿Pueden las plataformas sociales Web3 romper este ciclo, o la tokenómica simplemente gamificará la indignación de manera aún más eficiente?
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
7 me gusta
Recompensa
7
6
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
MevShadowranger
· hace3h
La llamada de atención más fuerte de la emoción violenta
Ver originalesResponder0
RegenRestorer
· hace3h
El marketing de la ira hace mucho daño.
Ver originalesResponder0
YieldWhisperer
· hace4h
La ira genera tráfico y dinero
Ver originalesResponder0
DYORMaster
· hace4h
Romper el círculo todavía depende de la línea.
Ver originalesResponder0
BlockchainArchaeologist
· hace4h
La monetización de la ira es veneno
Ver originalesResponder0
PretendingSerious
· hace4h
Incluso cuando estés enojado, debes hablar con razón.
Oxford University Press acaba de soltar su palabra del año 2025, y sorpresa sorpresa—está relacionada con cómo el baiting de ira domina nuestros feeds ahora.
La elección refleja lo que todos vemos a diario: las opiniones controvertidas y los debates acalorados no son errores en las plataformas sociales, son características que impulsan las métricas de engagement a niveles extremos. La indignación se ha convertido en la moneda de la atención en los espacios digitales.
Ya sea en las redes sociales tradicionales o en las plataformas descentralizadas emergentes, el patrón se mantiene. El contenido provocador se difunde más rápido, los algoritmos recompensan las reacciones emocionales, y de repente todos están optimizando para la controversia en lugar de la conversación.
Te hace preguntar qué significa esto para los espacios impulsados por la comunidad que intentan construir algo diferente. ¿Pueden las plataformas sociales Web3 romper este ciclo, o la tokenómica simplemente gamificará la indignación de manera aún más eficiente?