El CEO de Intel, Pat Gelsinger, acaba de renunciar. El momento es increíble, considerando que Intel ha estado perdiendo participación de mercado frente a Nvidia y TSMC, mientras quema miles de millones en fábricas de chips. Con la infraestructura de IA convirtiéndose en el nuevo petróleo, perder a tu capitán a mitad de carrera no es lo ideal. El espacio de los semiconductores ya es brutal: Biden le está imponiendo nuevas restricciones a China, todos están compitiendo por la producción de chips en el país, y Nvidia sigue ganando. Ahora Intel necesita encontrar a alguien que realmente pueda cambiar el rumbo de este barco. Pregunto quién será el siguiente.